La ampliación del teatro Bretón de los Herreros está situada en un contexto privilegiado en el corazón de la ciudad de Logroño, en una calle destacada por su vida y su situación, junto a la plaza del Espolón y la conocida calle Laurel. También se encuentra en un encuadre cultural exclusivo en el casco histórico dónde se ubican otros edificios de alto interés cultural como el antiguo edificio de correos y el museo de La Rioja. La nueva sala del teatro Bretón constituirá un nuevo hito en la ciudad de Logroño.
Infografía de la propuesta de fachada principal.
Proscenio, del latín proscenium, es el término por el cual se denomina a la división entre escenario y platea. De esta definición nacen las intenciones proyectuales del diseño mostrando el edificio como un proscenio a la ciudad, invitándola a pasar a su interior, a que los ciudadanos sean partícipes de la función.
La imagen exterior surge de un minucioso trabajo de insercción entre la gran personalidad de los edificios colindantes. Con la intención de no aportar un mayor número de elementos ornamentales, la fachada se concibe como un telón homogéneo de lamas verticales sobre un fondo oscuro. La geometría del telón aprovecha su curvatura para alinearse a la marquesina y al pretil del teatro existente aportando la continuidad buscada con el entorno.
La organización interior parte de la agrupación de usos de carácter público, semipúblico y privado. Esta organización se mantiene en altura y cada elemento del programa del nuevo edificio se conecta a sus usos homólogos del teatro existente. La propuesta entiende el funcionamiento del teatro y su ampliación como una totalidad, la accesibilidad universal y funcional se ha
perseguido desde el inicio del diseño.
Infografía de la propuesta del foyer o vestíbulo.